viernes, 24 de julio de 2009

Sexo, pudor y lágrimas

Sexo, cuestión tabú aún en el siglo XXI, aún entre mucho jóvenes, aún entre muchos padres y sus hijos. El sexo es natural, es vital, es necesario...La revolución sexual, acaecida en la segunda mitad del siglo XX en el mundo occidental, dio lugar a un profundo cambio en cuanto a la concepción de la moral sexual y el comportamiento sexual humano en general.
Con los adelantos sociales de los que hemos sido testigos, o de los cuales hemos recogido el testigo, no me siento avergonzada al afirmar que me considero una persona que antepongo la consecución de mi propio placer a consideraciones éticas o morales, que manifiesto una gran libido, que me gusta autosatisfacerme...en suma, y dicho con pocas palabras, soy puro sexo. El sexo soy yo. Y no me siento avergonzada de afirmarlo, mas todo lo contrario, orgullosa, mantego y digo esto con la cabeza bien alta!
Por experiencia sexual no se entiende el haber tenido un gran número de parejas sexuales, sino de la búsqueda y consecución de variedad en el repertorio sexual: situaciones diversas, maneras distintas de vivir la propia sexualidad. Soy una persona inquieta en el plano sexual. Hay dentro de nosotros un fuerte componente lúdico que no hay que intentar ocultar por el "quedirán", hay que expresar y desarrollar a base de inventiva, búsqueda de nuevas situaciones, y probablemente de nuevas personas con las que compartir los placeres y experiencias. No hay que conformarse con tener fantasías; es necesario llevarlas a la práctica. El sexo es para mí más que la simple satisfacción del deseo; es un fin en sí mismo. Mientras que para muchas personas el sexo supone una liberación, una descarga de la libido,otros, como yo,lo ven como un juego, del que se disfruta no sólo del resultado sino de todo el proceso. Eso es muy sano. Opino que mi deseo sexual y mi espíritu aventurero suelen imponerse a los tabúes sexuales imperantes en la sociedad, pero quién soy yo para decir esto, no?
Tenemos la edad para tener una personalidad sexual intrépida, aventurera, amante del riesgo y las emociones fuertes; una idea de sexualidad es innovadora, emprendedora y en cierto modo, impulsiva, cuándo sino? No hay que dar tanta importancia a la cantidad de experiencias sexuales vividas, sino a la intensidad de las mismas. Subyace a estas características una clara pulsión exhibicionista y, personalmente, una atracción por el lado oscuro del sexo, unida a ciertas tendencias auto-destructivas. La búsqueda del placer a través de situaciones arriesgadas desde el punto de vista social o sexual tiene mucho que ver con el eterno dualismo humano, la mitológica tensión Eros-Tanatos (pulsión de vida/sexo - pulsión de muerte/destrucción). De alguna manera, se puede decir que desprecio la seguridad y la comodidad.
Me considero una persona que antepone el propio placer sexual a consideraciones de tipo ético, moral o social. Tabúes sociales clásicos, como la fidelidad a la pareja, el respeto a las normas y las reglas no escritas de la sociedad, no representan para mi muros infranqueables, pues, quién dicta esas normas?
Onanismo, aunque se refiere en realidad al coito interrumpido,es el arte y culto religioso consagrado a la masturbación y al amor propio, práctica muy natural, entendida como un saludable ejercicio de auto-conocimiento, algo natural en todo ser vivo. Históricamente se asoció el onanismo al pecado y mitos populares como: " te van a crecer pelos en las manos", "te vas a quedar ciego", " te saldrán muchos granos el la cara", intentaron desalentar a quienes se vieran tentados de comenter el "pecadillo de Onán". Panda de hipócritas!
No hay que luchar contra el impulso sexual, dejémosle que pueda con nosotros y, aunque no necesariamente nos puedan tachar de inmorales, en la práctica si entre mí y el objeto de mi deseo se interpone la moral, apartaré la moral a un lado y buscaré satisfacer mi deseo, sin ningún tipo de duda al respecto. Ello puede implicar infidelidad a la pareja, tener encuentros sexuales en lugares arriesgados, y una serie de situaciones sexualmente estimulantes.
En mi humilde opinión, nadie debería desperdiciar una sola ocasión para tener un encuentro sexual. De vez en cuando es imperioso una componete amoral, latente en toda conducta sexual, es decir, que nuestro ansia de satisfacer nuestro deseos no se van frustados, consciente o inconscientemente, por las reglas y las normas sociales...dejémosnos llevar por nuestra libido.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Como liberadora de mentes te queda mucho trabajo por hacer... jejejeje

Un besazo!

Leticia Encinas Rosa dijo...

Uyyyy, Ion, es no es mi intención, yo no intento cambiar ni "liberar a nadie"...sólo planteo mis opiniones, mis puntos de vista respecto a diferentes temas, no pretendo(ni espero)influir a nadie, ni liberar mentes ni nada...todos tenemos muchos pelos ya como para saber como pensar!!!

Gracias por comentar.

Un besote y cuídate!

Unknown dijo...

ohhhhh(cara de escandalizado)
pero tu....¿te tocas?(dicho a media voz y bajando la cabeza un poco)
ayayayay....